Platón refiere que, en el año 590 a.C., unos sacerdotes egipcios relataron una violenta catástrofe a Solón, el gran legislador ateniense, durante una visita de éste a la región de Nicea, lo cual posiblemente sea cierto, pues se sabe que Solón había viajado a Egipto donde, casi con seguridad, había tenido acceso