El Monte de Dios
Tradicionalmente se considera que Horeb y Sinaí son dos nombres alternativos para la misma montaña y se la ubica en la región centro sur de la península del Sinaí.
La identificación para tal montaña es, o bien con el Yēbel Mûsâ (Monte de Moisés en árabe) o bien, menos comúnmente, con el Yēbel Serbâl, según la opinión de San Jerónimo (siglo IV d. C.). En realidad, ambos son dos montes prominentes de un mismo macizo; el Tûr Sînâ, de dos mil metros de altitud en promedio. Los religiosos del convento de Santa Catalina consideran como Horeb al pico más bajo del Mûsâ (el Raš es-Safsâf de 2112 m) y como Sinaí al más alto, de 2240 m, ubicado al sur. Tal ubicación está atestiguada desde por lo menos el siglo segundo de nuestra era, si no antes, por inscripciones nabateas que consideran sagrada a esta región y asume características de certeza desde la construcción del monasterio de Santa Catalina y su fortificación por obra de Justiniano.
No obstante se han sugerido otros emplazamientos para el monte de Yavé.
En el siglo XIX se propuso buscarlo en Arabia,cerca de la Madiama de Tolomeo más concretamente en las proximidades de algún cráter volcánico pues, se decía, la teofanía del Sinaí era el recuerdo de una erupción. Se barajaron, entonces, los nombres del Ħarrat al-Nar, en las proximidades de Medina,y del Talat Badr, en la misma región.Este últim nombre; “plenilunio”, evocaría de alguna manera el de Sin, dios lunar de Mesopotamia, y por lo tanto el de Sinaí. En estas hipótesis, por supuesto, no existe ninguna conexión entre la experiencia del Sinaí y la salida de Egipto, se trata de dos tradiciones distintas combinadas en la época del exilio. De todos modos parece muy improbable que se asociase a Yavé con erupciones volcánicas, su dominio divino original era la tormenta, singularmente las tempestades de arena y viento cargadas eléctricamente, específicamente el relato de la teofanía sinaítica toma elementos de un temporal sobre los contrafuertes de alguna cima elevada.
En consecuencia se propuso volver a al teoría tradicional y se llamó la atención sobre unas ruinas cercanas al Tûr Sînâ conocidas como Serabit el-Ħadim, donde se han encontrado inscripciones de carácter alfabético denominadas protosinaíticas. En ellas se repetía la grafía sny para designar el lugar, con lo cual la ubicación del Sinaí parecería resuelta.
Aún cuando así fuera, y las lecturas del protosinaítico siempre son conjeturales, estas ruinas corresponden a un centro minero egipcio en actividad desde el siglo XV a. C. (e incluso antes); un lugar poco recomendable para un grupo recién evadido del control faraónico. En este caso sí se debería separar la tradición de la Alianza de la del Éxodo.La ubicación de la montaña sagrada, independientemente de su nombre, debe establecerse, sin embargo, de otra manera. Las tradiciones básicas que subyacen al relato actual nos permiten deducir cual fue la ruta que tomaron los principales grupos salidos de Egipto, señaladamente el conducido por Moisés que resultó ser el portador de las tradiciones del Horeb, y en consecuencia conjeturar cual era su destino y donde tuvo lugar la experiencia de la Alianza.
Autor: Kaltrum (Gustavo Bessolo)
- Admin MH's blog
- Inicie sesión o regístrese para enviar comentarios
La profundidad mas accesible para cruzar, en el arrecife de Gordon, obviamente, la profundidad media actual es de entre 10 y 30 metros. . Mucho tuvo que soplar el aire pàra retirar semejante masa de agua, durante unbuen rato, mientras el pobre Moises mantenia los brazos en alto.
O bien el nivel del mar estaba sensiblemente mas bajo. Alejandria esta hoy sumergida, no?. Los moviemintos de placa, elevaciones temporales del fondo marino y microglaciaciones podrian haber probocar esas variaciones que permitieran a Moises cruzar por ahi?.
- Inicie sesión o regístrese para enviar comentarios