Anibal aislado en Italia no recibe los refuerzos de Magon Barca, 205 aC.
Un tema escasamente abordado por las publicaciones referentes a tan crucial conflicto, tal vez por la escasa relevancia del resultado final del mismo, o por no estar profundamente tratado en las fuentes antiguas, lo cierto es que la campaña de Magon Barca, el menor de los Barcidas, apenas recibe mención de parte de los entendidos, e incluso la batalla que librara en suelo Italiano es totalmente desatendida.
Mapa general de la segunda guerra punica
La tercera expedición a Italia significara la última posibilidad de Aníbal de recibir un apoyo de entidad en su guerra contra Roma. Ahora los papeles se habían invertido, la imposibilidad de mantener España, el estancamiento de Aníbal en Italia más la muerte de Asdrúbal, colocaban a Cartago en una difícil situación y Roma pasaba por primera vez desde el comienzo del conflicto a marcar los tiempos de la guerra. Es por esto que, con la expedición de Magon, Cartago se jugaba su última carta.
Por todo esto, resulta para mí, un acontecimiento de gran interés. Estamos además en presencia de un momento cumbre en el conflicto, los hechos se suceden con una velocidad increíble, Cartago y Roma mueven sus fichas apostando fuerte a sus estrategias hasta las últimas consecuencias, poniendo todo en manos de sus principales líderes.
Moneda con la imagen de Magon Barca.
1. Antecedentes, 216 a 205 a. C.
Tras la estrepitosa derrota de Cannas (216 a. C.), Roma vivió talvez los momentos más difíciles desde el comienzo del conflicto. El cartaginés se paseaba invencible por la península itálica, y nada hacia ver que fuera posible torcer el rumbo que llevaban los acontecimientos. Pero el temple romano se hizo ver en toda su magnitud, se rehicieron las legiones, se reelabora la estrategia a seguir, e incluso se pudo sostener el ejercito que los hermanos Escipion dirigían en España con la clara intención de detener todo intento de reforzar o profundizar lo logrado por Aníbal hasta el momento. Esta era la nueva estrategia romana, si el cartaginés no puede ser vencido en senda batalla campal, entonces seria aislado, sus suministros cortados, para finalmente obligarlo a abandonar Italia por sus medios.
Terriotorio del sur de Italia controlado por Anibal tras Cannas, 216 a.C.
Sin embargo Aníbal, tras su espectacular victoria, había enviado a su hermano Magon a Cartago en búsqueda de los refuerzos que le permitieran retomar la ofensiva tras el invierno. Tras su recordada entrevista con el senado cartaginés (en la que presentara los anillos de los nobles romanos caídos en batalla), el joven Barca logra los necesarios refuerzos, unos 14.000 mercenarios fueron reclutados para conformar el ejército de apoyo. Pero lo que sigue, es motivo de controversias, es que Asdrúbal (el otro hermano de Aníbal) había sido recientemente derrotado en Dertosa (primavera del 215 a. C.) y urgía de refuerzos, so pena de ser expulsado de España por los hermanos Escipion (padre y tío de el Africano). Por otro lado, la isla de Cerdeña se mostraba rebelde a Roma, oportunidad que Cartago y el mismo Aníbal no querían dejar pasar. Es así como el refuerzo que originalmente estaba dirigido al propio Aníbal, ahora se destinaba a sostener la difícil situación que se vivía en España. Las fuentes dan a entender que el mismo Aníbal auspiciaba dicho vuelco en las intenciones púnicas.
Legionarios romanos en España, para la epoca de las campañas de Escipion.
Podemos tener la idea que tal situación se debe en gran parte a las espectaculares victorias conseguidas por Aníbal en Italia, parece obvio que ante la disyuntiva de apoyar a un Aníbal invencible (y de que manera) hasta el momento, o sostener a un derrotado Asdrúbal, a riesgo de perder la principal fuente de recursos, la decisión final estaría dirigida a esta ultima opción. Aun así, Aníbal no seria dejado de lado, un interesante refuerzo le seria enviado, aunque no de la magnitud original.
Igualmente el plan solo se vería un poco retrasado, pues una vez expulsados los romanos de España, Asdrúbal marcharía con su ejército en apoyo de su hermano. Estamos en el año 215 a. C., y el panorama se veía del todo auspicioso para las intenciones púnicas.
Sin embargo los resultados no fueron los esperados (1). Las operaciones romanas en España, con sus altibajos, finalmente parecían conseguir sus objetivos. Pues habiendo entorpeciendo de gran manera el accionar de Aníbal en Italia, pero sin enfrentarle en campo abierto, logran volcar sus esfuerzos hacia otros teatros de operaciones, siendo el español el más importante. La llegada del joven Escipion acelera los acontecimientos, y la derrota obliga a los cartagineses a tomar una decisión, finalmente Asdrúbal por fin se dirigiría en apoyo de su hermano en Italia, es el año 208 a. C., ocho años después del primer intento de refuerzo hacia Aníbal un ejercito cartaginés se pone en marcha hacia la península Itálica. Finalmente Asdrubal será derrotado en un acto desesperado de los romanos en la batalla de Metauro (207 a. C., ver mi trabajo sobre dicha batalla), y Escipion vencerá definitivamente a los cartagineses en Illipa, en el 206 a. C. Para el 205 a. C. solo Gades resistía al poder romano en España.
Citas:
1. Malos resultados que obligaron a volcar mas recursos en España. Recordemos que Hannon, también traeria un ejercito de refuerzo a España desde Cartago en el 209 a. C.
2. Magon asume el control total de las operaciones, 206 a. C.
Luego de la derrota de Illipa, Magon se refugian en Gades, Asdrúbal Gisco aborda su flota y abandona España retornando a Cartago, su ejército mercenario se había dispersado, algunos pasaron al bando romano y otros volvieron a sus pueblos, sin fuerzas cartaginesas de entidad capaces de oponerse a Escipion*, para este terco cartaginés, poco había que hacer en España. Sin embargo, Magon toma el mando de la flota (fabrica algunos buques allí mismo) y monta una fuerza considerable, reclutando gentes en África y en España por intermedio de Hannon, esta claro que para el menor de los Barcidas la guerra no había terminado.
Su llegada entre los nativos españoles es elogiable, no por nada él era siempre el destinado para reclutar mercenarios entre ellos. Una vez más utilizara sus influencias para instigar la rebelión en el campo romano, y la revuelta de Mandonius e Indibilis. Estos lideres tribales, “habían pensado, que después de la expulsión de los cartagineses la soberanía de España pasaría a ellos. Cuando se dieron cuenta de que sus esperanzas se vieron frustradas, llamaron a sus compatriotas” “En un primer momento su descontento se limitó a murmullos entre ellos. "Si hay guerra en la provincia", dijeron, "¿qué estamos haciendo aquí, entre una población pacífica? Si la guerra se encuentra en una final ¿por qué no vuelve a Roma?" Entonces exigieron pago de sus cuotas atrasadas con una insolencia bastante incompatible con la disciplina militar o el respeto que los soldados deben mostrar a sus funcionarios.” Magon abrigaba gran esperanza en esta maniobra, a la que veía como la gran oportunidad de recuperar España, sufriendo el romano la deserción de sus aliados y el motín de sus hombres, y así se lo hizo saber a Cartago.
No obstante, el mas joven de los Barcidas también tuvo que sufrir las intrigas, un grupo de rebeldes planeaba entregar Gades a los romanos. El complot fue descubierto y los cabecillas detenidos y deportados a Cartago (la flotilla es interceptada por Lelio, pero logra llegar a África, sin poder evitar sufrir algunas bajas). Por contra Escipion, también tiene éxito en reprimir la revuelta de los nativos y de sus propios hombres, derrota a los españoles en senda batalla, e Indibilis envía a Mandonius a solicitar clemencia al romano, Livio nos cuenta como “Escipión, después de reprender severamente Mandonius y, por extensión, al gran ausente Indibilis, dijo que deberían ser ejecutados con justicia por su crimen, pero que gracias a su propia bondad y del pueblo romano, serán perdonadas sus vidas. No así, sin embargo, en cuanto a la demanda de rehenes, ya que estos serán una garantía para evitar un nuevo estallido de las hostilidades, ni se le quitaran las armas, pero aconseja dejen su mente en reposo.” Livio 28, 34
Es así que, fracasando Magon en su intento, y “sin esperanzas de lograr nada bueno en España” (Livio), hizo los preparativos para su salida (1).
Citas:
1. No puedo dejar de recordar, que para este momento, tiene lugar el entendimiento entre Escipion (a traves de Silanus) con Masinissa, germen para una futura alianza en tierras africanas con el lider Numida.
3. Magon deja España definitivamente, 206 a. C.
Ahora el joven Barcida recibía enérgicas ordenes del senado Cartagines, para tomar la flota de Gades y marchar a Italia, no sin antes reclutar el mayor numero posible de mercenarios entre los ligures y celtas, para luego reunirse con Aníbal, de manera de evitar que la guerra “que se había iniciado con tanta energía” (Livio), se traslade finalmente al África. La misiva venia acompañada de importante dinero, sin embargo Magon requiso en Gades otro tanto, “…No sólo su erario público, sino incluso sus templos fueron saqueados, y todos fueron obligados a contribuir con sus tiendas, privados de oro y plata…” (Livio) (1)
Tipica nave punica de la epoca.
Pronto zarpa a cumplir sus nuevos objetivos, no sin antes intentar una vez más, con una maniobra sorpresiva, una ultima acción en tierras españolas, aunque fracasa rotundamente una vez más. La misma estuvo dirigida hacia Cartago Nova, antiguo bastión cartaginés, donde luego de desembarcar una fuerza no lejos de la ciudad, saquea los campos aledaños y ocupa su puerto con la flota, su intención era atacar la muralla en la noche, por el mismo punto donde lo habían hecho los romanos.
Su información era que no había más que una guardia exigua en la ciudad, pero sus movimientos previos no habían pasado desapercibidos, y una fuerza de apoyo había sido organizada fuera de la misma. Su ataque a la muralla, solo fue recibido por la guarnición estimada, pero en un momento las puertas que daban a la laguna fueron abiertas derramando sobre los punicos una fuerza organizada de defensores que los arrollo hasta la misma orilla. Muchos se arrojaron al agua en plena oscuridad, solo para morir ahogados, al no encontrar “en la oscuridad qué dirección tomar o qué peligros a evitar” (Livio)(1).
La confusión llego también a los barcos, donde los marineros recogieron rápidamente sus cuerdas y anclas, para evitar que el enemigo los abordara. Las pérdidas ascendieron a 800 hombres entre las murallas y la orilla, y un número muy mayor encontró la muerte en el agua.
Tras este nuevo fracaso, que no le hizo más que perder hombres, recursos, y (lo más importante) tiempo, Magon decide retornar a Gades. Sin embargo no se le permite ingresar al puerto. Anclado en Cimbii, no lejos de Gades, envía emisarios presentando una queja, ¿por que las puertas están cerradas para él, un aliado y un amigo? Las gentes de Gades se excusaron diciendo que “estaban indignados por los actos de pillaje cometidos por los soldados durante el anterior embarque” 37. Magon perdió la cordura, invito al sufete de la ciudad y a su tesorero a una entrevista, solo para detenerlos, azotarlos y crucificarlos. Acto seguido, hizo velas hacia Pityusa, una isla cercana al continente, la misma, con población fenicia, donde fueron bien recibidos, además de obtener suministros, algunos hombres y armas. Con este nuevo aliciente, zarpa hacia las Baleares donde pensaba que podría, con el otoño ya avanzado, resguardar su flota durante el invierno. Luego de su partida, Gades se entrega a los romanos.
Magon dirigió sus naves primero hacia la isla mas grande y mayormente poblada, por ende mas apta para reclutar un interesante contingente de los famosísimos honderos baleares. Por otro lado, esta isla poseía un puerto donde apostar su flota. Para su asombro, su flota fue recibida de manera hostil, pues la isla había sido recientemente ocupada por romanos (2), “…cuando los cartagineses trataron de acercarse a tierra una lluvia de piedras cayó sobre ellos como una violenta granizada por lo que no se atrevieron a aventurarse en el interior del puerto…”, sin posibilidades, se hicieron a la mar y se dirigieron a la isla menor, muy fértil pero poco habitada (y con menos hombres para reclutar). La isla fue ocupada sin resistencia, se acampo en fuerte posición y se recluto una fuerza auxiliar de 2.000 hombres que se remitieron a Cartago. Los buques son retirados a la playa y pasa el invierno.
Honderos Baleares dando la bienvenida a Magon.
Citas:
1. Livio, Libro 28, La Conquista final de España, cap. 36.
2. El subarchipielago mantenia una postura proromana fruto de la peticion de paz de Legati de las Baleares a Escipion en el 217 a.C.
4. La Expedición a Italia, 205 a 203 a. C.
Mientras esto le ocurría a Magon, Escipion se dirigió a Roma y se entrevisto con el Senado y presento los resultados de su exitosa campaña, de cómo había destruido los ejércitos punicos de España, cuantas ciudades había tomado y cuantos pueblos ahora se rendía a los pies de Roma. Además, aprovecho para plantear su estrategia a seguir, la misma suponía la invasión de África para derrotar a Cartago en su tierra. Dicha estrategia fue duramente criticada por Máximo, quien argumento y con razón que:
“¿Prefieres la guerra con el que llaman Hamilcar, que expulsar a Aníbal y sus cartagineses de Italia? Aunque debes aferrarte a la gloria que has adquirido, mayor de lo que esperábamos, no debe enorgullecerse tanto de haber entregado usted España, en lugar de Italia”…”¿Por qué usted no aborda esta tarea? ¿Por qué no marcha directo de aquí a donde está Aníbal y lleva la guerra allá, en lugar de tomar el camino mas largo con la esperanza de que cuando usted haya cruzado al África, el lo siga usted? Usted está ansioso por ganar la gloria de llevar la guerra púnica a su fin; su curso natural será la de defender su propio país antes de ir al ataque del enemigo.” Livio 28, 41
Y continúa finalmente para alegar que:
¿Qué ocurriría, por otra parte si, sintiéndose (los cartagineses) muy seguros de la unidad de África, la fidelidad de sus aliados y de la fuerza de sus muros, y al ver que usted y su ejército ya no están aquí para proteger a Italia, los cartagineses envíen más de un nuevo ejército de África para Magon, quien, según tenemos entendido, ha dejado a las Islas Baleares y está navegando a lo largo de la costa de Liguria, para formar una unión con Aníbal? Livio 28, 42
La respuesta de Escipion no se hizo esperar, logrando finalmente el permiso para ejecutar su plan viaja a Sicilia con 7mil voluntarios y treinta barcos a preparar la expedición. Pero el alegato de Fabio Máximo tenía su razón, con la primavera Magon zarpaba también con una treintena de barcos, cumpliendo las órdenes que recibiera de Cartago. Durante el invierno había logrado reunir 12mil hombres de infantería y 2mil de caballería, arribando a Liguria con la esperanza de despertar en los galos y ligures su ardor guerrero en contra de los asuntos romanos. Cartago apostaba fuerte a su estrategia, liderada por sus máximos exponentes en aquel momento, Aníbal, en el sur de Italia como una espina clavada imposible de quitar, y Magon, arribaba a Liguria con su propio ejército, y levantaba en armas a las tribus del norte de Italia. Mientras el héroe mayor de Italia, se desentendía de la riesgosa cuestión en la que se sumergía su tierra, buscando la gloria en el exterior, a riesgo de fracasar y dejar a Roma al borde del desastre.
Mapa de situacion de la ultima etapa de la 2da Guerra Punica. Puede apreciarse las campañas de Escipion en España, de Asdrubal hacia Italia, y la que nos toca, la de Magon Barca a Liguria.
Ademas de la campaña africana de Escipion y el retorno de Anibal.
El arribo de Magon fue sin contratiempos, toma como base Savo y deja 10 buques de guarda, el resto lo envía a Cartago pues ya se rumoreaba el accionar de Escipion. Una vez asegurada su posición, hace trato con los Ingauni (quienes a su vez estaban en guerra con los montañeses Epanterii). Estos ligures se sumaron sin dudarlo a su ejército, el cual se incrementaba día a día, el nombre del cartaginés, de gran fama, era como un hechizo a los oídos de los bárbaros, y como si fuera poco, los apoya en su guerra con los montañeses. Pero la acción más destacable fue sin dudas la toma y destrucción de Génova, casi sin oposición.
La noticia llega Roma rápidamente, y el pánico fue general, por tercera vez un ejército cartaginés, comandado por otro Barcida, invadía Italia. La alegría por las victorias anteriores, incluida la de Metauro dos años antes, se esfumó en un instante. Rápidamente se disponen legiones para ser enviadas a la región. Las de Etruria son enviadas a Ariminum, y luego, junto a las fuerzas de la ciudad, son enviadas a Arretium.
Livio nos dice que nada importante ocurrió con Aníbal por esas fechas, salvo la peste que afecto por igual a romanos y cartagineses. Lo más destacable es la intercepción de una flota púnica de pertrechos y provisiones, que se disponía a abastecer a Aníbal, lo que demuestra a mí entender la dificultad que significaba para Cartago enviarle refuerzos a Aníbal.
Por entonces, en Cartago se reciben noticias del desembarco en costas Áfricanas de las fuerzas comandadas por Laelius, ahora el pánico invade la ciudad púnica, y los gritos de lamentos no se hace esperar:
"Ha de la Fortuna", y se preguntaron, "por que cambió todo por completo, para la nación que en el orgullo de la victoria tenía un ejército ante las murallas de Roma, y después de hacer que muchos de los ejércitos del enemigo muerdan el polvo, obligando a sumisión a todos los pueblos de Italia, ahora en el final de la guerra tienen que presenciar la desolación de África y el sitio de Cartago, sin tener nada comparable a los recursos que tienen los romanos para cumplir con estos problemas? En la plebe romana, en el Lacio, se suministran con soldados siempre más eficientes y cada vez más numerosos para sustituir a todos los ejércitos que han perdido, mientras que nuestro pueblo es totalmente contrario al gusto por la guerra, ya sea en la ciudad o en el interior del país. Tenemos que contratar a mercenarios de entre los africanos, a los cuales la dependencia no se puede confiar, que son tan volubles como el viento. Los nativos son hostiles ahora y soberanos; Syphax se ha vuelto muy en contra de nosotros desde su entrevista con Escipión; Masinissa ha declarado abiertamente a sí mismo nuestro enemigo más amargo. En ninguna parte parece la más mínima posibilidad de ayuda. Magon no ha creado cualquier brote de la Galia ni ha efectuado su encuentro con Hannibal, Hannibal se está debilitando a sí mismo, tanto en prestigio y en la fuerza. " Livio 29, 3
No en cuentro mejores palabras para expresar la desazon cartaginesa, amen de dejar claro cual era el verdadero poder de Roma, el mismo Lacio, su sistema de alianzas, que le proporcionaba incontables hombres y recursos con los que afrontar los reveses. He aqui la verdadera razon de la victoria final romana. Pero tampoco, los cartagineses, pasado el pánico inicial, se entregaran al derrotismo de algunos de sus ciudadanos. Al contrario, confiados en la estrategia llevada a cabo hasta el momento, en un gran esfuerzo reúnen un ejército de refuerzo que es enviado a Magon en una flota (25 buques, 6mil hombres, 800 de caballería y 7 elefantes), incluido un importante dinero destinado a la contratación de mercenarios. Además lo exhortaron vehementemente a dirigirse al encuentro de su hermano. Acto seguido, la ciudad se pertrecho anticipándose a un posible asedio romano, armas y alimentos fueron acopiados. (1)
Recibido estos refuerzos, Magon rápidamente convoco a reunión con los principales líderes galos y ligures. Su intención era no perder tiempo, pretendía ponerse en marcha lo antes posible buscando el encuentro con su hermano, sin embargo sus aliados ligures y galos, no pensaban igual. Justamente, tiempo es lo que estos le reclamaban antes de proceder a una movilización de magnitud. Los galos aducían la presencia reciente de los ejércitos romanos en las proximidades de su territorio, a estos, el cartaginés les pidió la asistencia que podrían proporcionar en secreto. En cuanto a los ligures, la lejanía de las tropas romanas, les daba total libertad, pero solicitaban dos meses para incrementar sus fuerzas. Sin más opción, Magon decide esperarlos y pospone su marcha. Mientras tanto los romanos maniobraban en Etruria y la Galia para impedirle el paso. No hay caso, Magon se estancaba en Liguria.
Guerreros Galos. Correspondientes al periodo. Su participacion sera clave en la batalla que librara Magon en suelo Italiano.
Citas:
1. Además de los señalados refuerzos, la actividad cartaginesa se extendió a invitar a Filipo invadir Sicilia o bien Italia, a cambio de 200 talentos de plata. Además de entrar en tratativas con Sifax, estableciendo un supuesto matrimonio de este numida con una hija de Asdrúbal Giscon. Book 29: Scipio in Africa, 4.
5. Se aproxima la batalla. Los ejércitos enfrentados.
Las esperanzas de Magon estaban depositadas además, en una posible insurrección de Etruria. Había recibido en su campamento a los principales líderes de este pueblo, sin embargo el rápido accionar de los romanos desbarata todo intento de rebelión.
“El cónsul M. Cornelius mantiene su control de la provincia más por el terror creado por el proceso judicial que por la fuerza de las armas. Dirigió las investigaciones que el Senado le había encargado de hacer, sin ningún respeto de las personas, y muchos Etruscos nobles que habían sido entrevistados por Magon o habían mantenido correspondencia con él, sobre la defección de sus cantones fueron apresados y condenado a muerte, otros que a sabiendas de ellos mismos son igualmente culpables eligieron el exilio y fueron condenados en su ausencia.” (1)
Los sucesos en Italia y África se sucedían, pero Magon no lograba salir de su estancamiento, al punto de no poder evitar el encuentro con las cuatro legiones enviadas a detenerlo y que estaban comandadas por el Pretor P. Quintilius Varus y el Proconsul M. Cornelius. Este enfrentamiento, esta bastante bien tratado por Livio, y aunque su relato presenta algunas lagunas, podemos hacernos una idea mas o menos fiel de lo que pudo haber sucedido en dicha batalla. Las dudas surgen en todo lo referente al sitio donde tuvo lugar el enfrentamiento, la conformación del terreno y la disposición de los ejércitos que no esta del todo explicita, aunque esto último puede ser deducido del relato de Livio.
Esta claro que tuvo lugar en algún sitio de Liguria o de la Galia Cisalpina (pero cercano a Liguria), cómodo para las evoluciones de las infanterías, aunque pongo mis dudas en lo referente a las posibilidades de la caballería. Al parecer ambos ejércitos formaron en línea de manera tradicional, con la particularidad que ambos decidieron mantener un fuerte contingente como reserva. En el caso de Magon, estos eran galos, en el caso de los romanos, estos eran la XIII Legión del procónsul M. Cornelius. Livio señala la participación de 3 legiones, las denominadas XI, XII y XIII (quedando en reserva), cada una acompañada de su equivalente aliada. Esto daría entre 25.000 a 30.000 y no más de 4.000 de caballería.
Magon mantenía consigo una fuerza veterana de su accionar en España (tal vez libio-fenicios de infantería pesada, restos de la batalla de Illipa), mas los mercenarios españoles reclutados por Hannon (aunque muchos de estos fueron perdidos en un ataque romano), posiblemente los baleares que enviara a España le fueran remitidos en el ultimo envío desde Cartago (mas un importante numero de infantes que podrían ser libio-fenicios o mas españoles mercenarios), que también incluía 800 de caballería (numidas seguramente) y 7 elefantes africanos. Además había reclutado un importante contingente de Ligures (probablemente solo infantería), y un numero interesante, pero algo menor, de Galos (que seguro incluiría infantería y caballería). Por lo tanto el ejército de Magon podría rondar los 30 o 35 mil hombres, de los cuales alrededor de 32.000 serán de infantería y 3.000, o poco mas, serán de caballería (incluidos los 800 numidas).
Es probable que Magon maniobrara en dirección a Italia central, tal vez ya había salido de Liguria y estaba ingresando en la Galia Cisalpina. Pero lo más probable es que no estuviera muy lejos de su base de operaciones en Liguria. Realmente los romanos se habían adentrado en la Galia y maniobraban en busca del cartaginés. No hay detalles de cómo y donde, pero ambos ejércitos se encontraron y las tropas se ordenaron lo mejor posible, como ya dije, cada bando se guardo una carta de victoria, ambos contendientes se jugaban muchas cosas en esta partida. Magon el destino de su misión, tal vez la ultima chance de Cartago en apoyar a su máximo héroe, Aníbal. Roma una vez más en la cuerda floja, el fracaso era algo que no se podían permitir en este nuevo lance. Así dispuestas las cosas, la batalla fue inevitable.
Cita:
1. Todos sus bienes fueron confiscados.
La otra versión - la batalla según Livio.
La primera cuestión surge en cuanto a la disposición de ambos ejércitos. Livio aporta algunos datos muy precisos pero que no alcanzan para un panorama completo, Ademas de ser por lo general referentes al ejército romano. Pero que nos pueden servir para lograr una reconstrucción final, lo mas fiel posible. El primero de ellos dice:
“Las legiones del pretor formaron la línea de batalla. Las legiones de Cornelio se mantuvieron en reserva, pero cabalgo al frente para tomar el mando de un ala, el pretor mandaba la otra, y ambos exhortaron a sus soldados para hacer una furiosa carga contra el enemigo.”Livio
De aquí deducimos que el ejercito romano formo con 4 legiones en línea y dos de reserva. Las cuatro legiones del pretor (este magistrado romano podía desempeñar una jefatura militar, por tal motivo creo bien adjudicarle dos legiones romanas y dos aliadas) formaran de manera tradicional, las dos romanas al centro (la XI y la XII) y las dos aliadas en las alas. Las fuerzas del procónsul, que estimo en dos legiones, una romana (la XIII) y otra aliada, se mantendrán en reserva. Tal vez una de estas no estuvo presente en batalla, era normal que una legión cuide el campamento. Toda la caballería formara en primera línea (salvo las de las legiones en reserva), a la izquierda la aliada, a la derecha la romana.
Ahora bien, con los cartagineses es mas difícil, pues no hay nada referente a su posicionamiento, pero si nos dejamos guiar por los enfrentamientos previos contra los romanos, y sabiendo que Magon estuvo presente en batallas decisivas como Trebbia, Cannas, o Illipa, y que seguramente conocía y compartía con sus hermanos una “idea táctica” similar, podemos imaginarnos la disposición de su ejercito en el campo de batalla, aunque reconozco que serán solo conjeturas. Entiendo entonces, que dos alas de infantería muy fuertes flanquearan a un centro algo más flexible o más débil. Tal vez, tropas africanas, o las mas veteranas traídas de España, se ocuparan de los flancos, y los recientemente reclutados o enviados desde Cartago, tomarían el centro de su dispositivo, descartando los galos, que conformarían la reserva, junto a los elefantes (esto lo explicare luego). Por último, y como ya había sugerido mas arriba, los flancos serán cubiertos por alas de caballería. A la derecha, los numidas; a la izquierda, posiblemente galos.
¿Cómo podemos afirmar esta disposición en los punicos? La guía sigue siendo el relato de Livio. El mismo señala que luego, cuando la batalla parecía estancarse, y los generales romanos temían que el miedo pasara a sus hombres, estos deciden ordenar una furiosa carga de caballería que decidiera la batalla a su favor.
“Como no hacían ninguna impresión o daño sobre ellos (sus enemigos), Quintilius dijo a Cornelio, "Como puede ver, la batalla está avanzando demasiado lentamente, el enemigo se encuentra ofreciendo una inesperada resistencia, corremos riesgo que su miedo inicial se transforme en audacia. Tenemos que soltar un huracán de caballería en contra de ellos si queremos sacudirlos y hacerlos retroceder.” Y para llevar a cabo dicha “tormenta de caballería” el “procónsul (Cornelius) se movería a la izquierda del pretor (Quintilius), donde decidirían que hacer” (Livio).
La primera deducción que podemos hacer de tal cita es la posición de los mandos romanos en la línea de batalla al comienzo de las acciones, Quintillo Varo a la izquierda y Cornelio a la derecha. Pero lo más importante es deducir que será por este flanco (el izquierdo romano, el derecho cartaginés) por donde se ejecutaría la mencionada carga. Para mas sustento a mis palabras, existe otra circunstancia relatada por Livio, quien al referirse a la caballería romana, claramente nos dice:
“Cuando combatía de cerca y podía utilizar la espada y la lanza, la caballería romana era superior en la lucha, pero al cabalgar un caballo asustado, era un fácil objetivo para los dardos (jabalinas) de los Numidias.
Esto nos indica que dicha carga enfrento a los romanos (los aliados probablemente) con los numidas. Estos hábiles jinetes, en las anteriores batallas habían formado siempre a la derecha del ejército punico, Aníbal allí los coloco en Trebbia y en Cannas. Incluso Escipion en Zama, los ubicaría allí. Otra cosa que queda evidenciado es que Magon, ubico tambien en la reserva a sus elefantes. Despues de todo eran muy pocos, y era mas efectivo resguardarlos esperando la oprtunidad indicada.
Por tal motivo, estoy más que seguro que la carga de caballería romana, frenada por los elefantes y castigada por los jinetes numidas, se produjo con total seguridad, en la izquierda romana. Destaco tambien las palabras de Livio en cuanto al combate entre numidas y romanos, con evidente ventaja de estos ultimos. Tal situacion, de combate cercano con numidas, es sumamente raro, solo puede ocurrir si estos exelentes jinetes africanos no pueden ejecutar sus habiles evoluciones en campo. Para tal tipo de maniobras necesitan mucho espacio libre, que evidentemente no tenian, de ahi que fueran obligados a combatir de una manera que no estaban acostumbrados y fueran aventajados por los romanos. Por tal motivo es que mas arriba me anime a aventurar que el campo de batalla no era favorable para las maniobras de caballeria.
El otro punto controvertido es la utilización de las reservas, ya sabemos que la de los romanos es la legión de Cornelius, mas adelante Livio nos dirá que es la XIII, y que Magon para oponerse a “esta nueva legión” también utilizara su reserva, aclarando que eran los galos. Hasta aquí todo claro, pero cuando los galos hacen su aparición, Livio dice que los hastati de la XI legión se sentían confiados en vencerlos: “Estos fueron galos, y los hastati de la undécima legión no tuvieron muchos problemas en derrotarlos. Luego cerraron filas y atacaron a los elefantes”. ¿Cómo puede ser esto? Si primero indica claramente que los galos fueron opuestos por Magon a la “nueva legión”, esta claramente es la que estaba en reserva, y es señalada primero como la XIII, ¿Por qué se alegra la XI en ver a los galos? O mi texto tiene un error, o el del error es Livio. Por tal motivo he decidido dejar a la XIII en el choque con los galos y la XI en la primera línea de batalla.
6. Batalla final y fin de la campaña, 203 a. C.
Despejadas las dudas iniciales, referidas a la disposición de los ejércitos rivales enfrentados, abordar el relato de lo sucedido en la batalla no resulta difícil pues Livio nos ofrece interesantes detalles. Magon, al igual que Asdrúbal años atrás, tampoco pudo evitar ser interceptado, viéndose obligado a combatir antes de encontrarse con su hermano. La batalla librada por las fuerzas romanas y punicas, hasta donde pude ver, no ha sido estudiada, por lo que supongo que este, mi trabajo, es el primero en hacerlo.
En razón de lo dicho en el apartado, puedo afirmar que la batalla es del todo muy interesante. Ambos contendientes plantearon sus líneas de batalla de forma equilibrada. Al parecer, el ataque inicial correspondió a los romanos, estos enardecidos por las arengas de sus mandos, arremetieron furiosamente contra la línea cartaginesa. Esta, que vacilo al principio debido al fuerte choque, pronto se recompuso y detuvo el ímpetu inicial romano. El pretor Quintillo Varo, advirtió que el miedo inicial de los punicos, ante el pobre progreso romano, podría tornar en audacia, trasladando el miedo a la propia línea. Es así que el pretor y el procónsul, reúnen toda la caballería posible en el flanco izquierdo, seguramente concientes de la superioridad del jinete romano (y/o aliado) en el combate cercano en comparación con los numidas que combatían en ese sector. Estos, superados en numero y en desventaja táctica evidente, retroceden cediendo su flanco. Tal situación era de gran riesgo para los cartagineses, pero por algo Magon era un Barcida. Tomando los elefantes que, prudentemente había mantenido en reserva (después de todo solo eran siete), los lanza sobre la caballería romana que ve como sus caballos se descontrolan solo ante la presencia de las bestias.
La batalla en este punto se torna de lo más violenta, ahora el flanco izquierdo romano pasa a la defensiva, los numidas se recuperan y dan cuenta fácilmente de los jinetes romanos en sus asustados e incontrolables animales, y los elefantes pisotean impunemente a los jinetes caídos. Para colmo, la XII legión la estaba pasando muy mal, había sufrido gran cantidad de bajas y si se mantenía en posición era mas por el orgullo de no ser ellos los primeros en ceder terreno que por la fe en si mismos de lograr gran cosa. En estas condiciones, el flanco izquierdo romano, no duraría mucho tiempo. Era momento para que entren el juego las reservas, ambos contendientes lo entendían así. Los romanos, para intentar dar vuelta la difícil situación a la que habían sido llevados. Los cartagineses, para intentar profundizar los logros en ese sector del campo. El que mejor uso hiciera de sus reservas, sin duda obtendría la victoria ese día.
Los primeros en utilizar sus reservas, fueron los romanos. La XIII legión, que esperaba ansiosa su momento, irrumpe por el flanco, con sus proyectiles dejan fuera de juego a los elefantes, cuatro mueren y el resto se desbanda. Para detenerlos Magon hecha mano de sus galos de la reserva, estos, ante la vista de los romanos no debieron causar gran impresión, Livio nos cuenta que los hastati no suponían gran problema en derrotarlos. Y así fue realmente, pues todo el ímpetu desplegado por estos bárbaros, choco y se esfumo contra el acero romano, para colmo, los elefantes descontrolados también los atacaban, la resistencia de los galos duro un suspiro. Por otra parte, desaparecidos los paquidermos, la caballería romana se rehacía y rechazaba definitivamente a los numidas.
Como si esto no fuera poco para el joven Barcida, la XI legión se imponía claramente en su sector. Ante tal favorable situación, la línea romana, muy comprometida en un principio, avanza ahora y obliga a su rival a ceder terreno al verse flanqueado y muy presionado de frente. Magon logra sin embargo mantener a su ejército ordenado e indica un repliegue general que se ejecutaba de forma muy ordenada, hasta que el desastre se hizo presente. Y esto ocurrió cuando el líder punico cae gravemente herido y es retirado del campo de batalla inconsciente. Sus hombres lo creen muerto y entran en pánico, tal era la esperanza depositada en su líder, al que estaban dispuestos a seguir al fin del mundo, pero muerto el nada valía la pena. En consecuencia la línea punica se desarmo, y el hasta entonces ordenado repliegue torno en desesperada huida. Los enceguecidos romanos les dieron caza el resto de la jornada, dando cuenta de más de 5.000 hombres. Las bajas romanas, también fueron importantes, 2.300 legionarios perdieron la vida, la mayoría de la XII legión.
7. Cartago reclama la vuelta de sus líderes. Muerte de Magon.
Magon huyo oculto por la noche, todo lo rápido que su herida le permitía. Encontró refugio en la tierra de los Ingauni de Liguria, donde se entrevisto con una embajada de Cartago que “le informó de que tiene que navegar para África a la mayor brevedad posible, a su hermano Aníbal, similares instrucciones se le habían dado, y estaba a punto de hacerlo. Cartago no está en condiciones de conservar lo conseguido en las Galias y en Italia.”19
No había mucho que meditar, para Magon las cosas estaban claras, había sido duramente derrotado, y corría serios riesgos de ser nuevamente atacado por los victoriosos romanos. Por otra parte, los Ligures pronto se desentenderían de la causa púnica, ni hablar de los Galos. Pensó que un viaje por mar seria menos riesgoso para su herida, que el traqueteo de las marchas y las batallas. Se embarco entonces con sus hombres que todavía le eran fieles y zarpo rumbo a Cartago. Era el final para su aventura en la tierra del enemigo, ahora debía prepararse para defender a su país en su propia tierra, pero no había alcanzado Cerdeña cuando la muerte lo alcanza, no menos a causa de sus heridas, como del terrible dolor por las metas no cumplidas. La flotilla continúa rumbo a Cartago, llevando consigo los restos del ejército de Magon, algunos buques son interceptados por una flota romana que operaba en la zona, el resto logra llegar a salvo casi al mismo tiempo que lo hiciera Aníbal.
Livio cuenta que la orden de regresar a África, fue un durísimo golpe para el Barcida, y no dudo que así fuera. Pero también afirma que Aníbal, totalmente fuera de si, acusaba a su país de no hacer todo lo posible en sostener sus logros (1). No eran los romanos los que conseguían que se retirara de Italia, sino sus mismos compatriotas. El que había vencido en mil batallas, que contaba sus victimas por cientos de miles, que había puesto en jaque a Roma en su tierra por 15 años, ahora debía dejar todo a tras y volver a su tierra, a hacer lo que otros no habían podido. Reune a sus hombres mas fieles y se embarca (2).
También cuenta que Aníbal, echando una ultima mirada a las costas de Italia, acusa a los dioses y a los hombres por su suerte adversa, y se pregunta si, luego de Cannas no debería haber marchado con sus ejércitos que todavía “olían la sangre de la victoria sobre las tierras de Cannas” directamente hacia Roma (3).
Tras 16 años de campañas y victorias ¿Cuáles habían sido sus errores para que todo termine de esta manera? ¿A que o quien hay que adjudicarle su fracaso? No es este trabajo el indicado a mi parecer para abordar tal cuestión, aunque creo que más de una vez he dejado bien claro mi posición al respecto. Lo cierto es que finalmente Aníbal daba por terminada su campaña en Italia y volvía a su tierra. Sin dudas su cabeza buscaba las respuestas, y estoy de acuerdo con Livio cuando afirma que: “En medio de estas acusaciones y lamentos, era llevado de vuelta Aníbal, tras su larga ocupación de Italia.” 20
Mapa de Situacion Liguria / Galia Padana, 205 a 203 a.C. Para la realizacion del mismo, he seguido las pistas de Livio y un poco de imaginacion. Livio habla de Savo y la toma de Genua. Tambien del avance romano por la Galia, pero del combate final no hay datos. El mapa que consegui tiene trazadas las calzadas romanas en la zona, que supongo son posteriores al episodio (sin embargo me parece logico suponer caminos pre-romanos coincidentes), estos son la Via Posthumia de Liguria a la Galia y la Via Aemilia opuesta a esta. Siguindo estos caminos logicos para ambos contendientes me da por resultado el probable sitio de la batalla, que como se ve, daria en las cercanias de Ticinum y Placentia. No deja de ser todo deducciones mias.
Citas:
1. Aunque también dice que ya tenía sus barcos listos para la partida algo del todo contradictorio para alguien que no quiere irse y abandonar lo conseguido. Por esto creo muy tendenciosas las palabras de Livio a cerca de la retirada de Aníbal. He basado mi trabajo en el y respeto sus palabras, y así lo reflejo en mi trabajo, pero debo aclarar no estar del todo de acuerdo con ellas. Ya he dado mi parecer sobre la estrategia púnica más de una vez, aunque acepto que es un tema del todo controvertido. Dejare para más adelante, tal vez en un trabajo sobre Escipion o el mismo Aníbal, abordar con profundidad esta cuestión. Aunque no esta demas recordar la suerte de los anteriores lideres cartagineses, pues repasando sus campañas (por ejemplo Amilcar Barca en Sicilia, durante la primera guerra punica) veremos como era su costumbre manejarse practicamente solos, sin ningun apoyo de la metropoli.
2. El resto, los que no quisieron continuar a su lado, son pasados a cuchillo en el templo de Juno Iacinia, un santuario que había permanecido inviolable hasta ese momento. Otros son distribuidos en guarniciones, ¿esperaba regresar pronto?
3. Tal vez sea esta una de las afirmaciones que dan origen a la vieja disputa tan debatida. Nuevamente afirmo que, y aunque mis ideas sobre el asunto ya son conocidas por todos ustedes, he decidido seguir el hilo del texto de Livio. Me pregunto, ¿sabia Livio de que tras Cannas se avecinaba el invierno? ¿Sabia Livio de las dificultades (para ambos bandos) que hasta ese momento habían presentado los asedios a plazas fuertes? Si tanto había sufrido Aníbal por refuerzos o suministros ¿Cómo haría para sostener un asedio a una ciudad como Roma?
8. Epilogo
La salida de Magon y la de Aníbal, fueron notificadas en Roma al mismo tiempo. La alegría en Roma fue total, y la sensación de alivio inmensa. Sin embargo, fueron castigados los responsables de que ambos cartagineses partieran sin dificultad, sea por falta de coraje o fuerza, “a pesar de que había recibido instrucciones expresas del Senado en este sentido”21(1). Al mismo tiempo, una comisión de Sagunto informaba como había sido capturada una misión de Cartago que había llegado a España con el fin de contratar mercenarios. Estos fueron encarcelados y su botín devuelto a los Saguntinos, quienes se mostraron muy agradecidos (2).
Roma festejaba. Tras tantos años de durísima guerra, de haber soportado al enemigo vagando con libertad por su tierra, ver como dos veces impunemente otros cartagineses osaban ingresar a Italia con sus ejércitos. Tras haber tenido que soportar la presencia del campamento enemigo a la vista de la ciudad, haber sufrido durísimas derrotas, y la muerte de miles de compatriotas.
“¿Con qué frecuencia en nuestros consejos, hemos escuchado la queja de los hombres que levantan sus manos al cielo y se preguntan si alguna vez vendrá el dia cuando Italia se vería liberada de la presencia de su enemigo y florecera en la paz y la prosperidad! Por fin, después de dieciséis años de guerra, los dioses nos han concedido este beneficio…” Livio, 21.
Se decretaron cinco días de gracias en todos los santuarios y se elevaron a 120 las victimas a sacrificar. Sin embargo, “un sentimiento de ansiedad” los invadió inmediatamente, sentían que era momento para la prudencia y no para los festejos. Pues ahora “todo el peso de la guerra”, que hasta el momento había obligado la concurrencia de cada hombre de Roma, “se redujo a la suerte de un ejercito y su comandante” 21.
Citas:
1. ¿Se ha hablado de esto alguna vez? Entonces ¿en que consistía la estrategia de Escipion? Si como todos dicen, su idea era llevar la guerra al África para obligar a Aníbal a abandonar Italia, ¿a que vienen estas palabras de Livio?
2. Esto demuestra que, aun habiendo perdido España, los cartagineses se animaban a aproximarse a sus costas con el fin de contratar mercenarios. Evidentemente esto lo hacían porque suponían tener éxito.
Bibliografia:
Tito Livio. Historia de Roma desde su Fundación. (Principalmente)
Polibio de Megalópolis. Historia Universal bajo la Republica Romana. (Omnipresente)
Mapas y dibujos de:
Osprey - MAA 158 - Romes Enemies (2) - Gaellic & BritishCelts
Osprey - MAA 180 - Romes Enemies (4) - Spanish Armies
Osprey - Battle Orders 027 - The Roman Army of the Punic Wars
Osprey - Campaign 036 - Cannae 216 BC Hannibal Smashes Rome's Army
Esquemas.
Mapas de las Baleares, mapa de Liguria, y esquemas de batalla: marvel77
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Si lo de Galland viene por el piloto de la Luftwaffe, no obstante el autor del articulo no es Galland (o sea no soy yo) lo que pasa que soy yo quien sube los articulos. El sistema de almacenamiento los etiqueta por quien los envia, luego para administrar los contenidos es mas sencillo de organizar.
Hola, perdon la demora en responder, yo soy marvel77, el autor del articulo. Gracias Alfonso por tus palabras, y si quieres te invito a trasladar tu comentario al foro de MH donde originalmente fue publicado dicho articulo hasta ser publicado aqui y profundizar en lo que quieras saber, siempre y cuando tenga las respuestas, te las dare con gusto.
Este es el link del tema en el foro:
http://historia.mforos.com/681595/8317385-tercera-expedicion-a-italia-ma...
Igualmente paso a dejarte algunos comentarios sobre lo que has dicho:
Sobre la batalla. La verdad que los datos son muy pocos, y todo lo que se puede deducir de ella esta en el punto que llame, "La batalla segun Livio", es tan poco lo que se sabe que es muy dificil poder ser riguroso con el comentario. No se sabe nada del terreno o lugar donde se dio, lo que ves en el trabajo son todas deducciones mias. Menos aun sobre la constitucion de las fuerzas, o la formacion adoptada, aunque como vio usted, esto ultimo puede ser deducido en parte. No creo que la derrota de Magon tenga que ver con no conocer a su rival, sino el haberse estancado en Liguria lo que facilito su intercepcion tan lejos de su hermano.
Sobre lo que dice de Anibal y Alejandro, no hare comentario aqui. Puede buscar en el foro debates sobre el tema, que hay muchos y muy buenos. Solo dire que no estoy de acuerdo, Anibal es muy capaz, un genio realmente, pero Alejandro esta en otro plano.
Sobre lo de la marcha o no, de Anibal a Roma luego de Cannas, le puedo decir lo mismo. En el foro hay muy buenos debate sobre el tema, puede buscarlos. Aunque puedo decirle que yo soy de la opinion de que era innecesaria tal marcha, totalmente irredituable para el punico, accion que solo le traeria inconvenientes.
Bueno, repito mi agradecimiento por sus comentarios. Me alegra que le haya gustado el trabajo.
Un saludo,
marvel...
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